Viajar es una experiencia emocionante y enriquecedora, pero a menudo puede ser un desafío mantener una alimentación saludable mientras estamos fuera de casa. Es aún más complicado cuando tenemos un presupuesto limitado. Afortunadamente, existen estrategias y consejos que podemos seguir para disfrutar de comidas nutritivas sin gastar demasiado dinero. En esta entrada de blog, te compartiré algunos consejos prácticos para comer saludablemente mientras viajas con un presupuesto moderado.
Planifica con Anticipación
Antes de comenzar tu viaje, dedica un tiempo a investigar sobre los lugares que visitarás. Busca restaurantes o mercados locales que ofrezcan opciones saludables a precios asequibles. También puedes investigar si tu alojamiento cuenta con una cocina o área para preparar alimentos. En ese caso, considera la posibilidad de cocinar algunas comidas por ti mismo, lo cual no solo te permitirá ahorrar dinero, sino también tener un mayor control sobre los ingredientes que utilizas. Esto es ideal si te hospedas en el mismo lugar durante varios días.
Cuando visité Lisboa, me alojé en un AirBnB donde tenía acceso a la cocina y varios supermercados cerca; además, mi host me facilitó portacomidas, cubiertos, recipientes y me reservó un espacio en la nevera y en la alacena para mis compras. Como iba a pasar cinco días en la misma ciudad, decidí preparar mis almuerzos y cenas con el fin de ahorrar tiempo y dinero, y en total no gasté más de 15 euros. Hice ensaladas, un guiso de garbanzos y verduras, y para la proteína alternaba entre huevos cocidos y atún. Asimismo, para mis desayunos y snacks, compré frutas, barras de cereal y maní.
Pero no podía irme de Portugal sin probar los famosos Pasteis de Nata.
Elige Opciones Saludables en los Restaurantes
Cuando comas en restaurantes, busca opciones de menú que incluyan alimentos frescos y nutritivos. Opta por platos que contengan una buena cantidad de vegetales, proteínas magras y granos integrales. Evita los alimentos fritos o con alto contenido de grasas saturadas. Además, considera compartir las comidas con tus compañeros de viaje para reducir costos y evitar desperdicios.
En España, por ejemplo, los precios en los restaurantes no son tan elevados comparado con otros paises de La Unión Europea. Puedes conseguir almuerzos o cenas de tres tiempos (Entrada, plato fuerte y postre) por aproximadamente 12 euros. También puedes ir de tapas con amigos y compartir pequeñas porciones de distintos clásicos de la comida española a un precio asequible.
Aprovecha los Mercados Locales
Los mercados locales son una excelente opción para adquirir alimentos frescos y asequibles. Explora los puestos de frutas y verduras para abastecerte de productos nutritivos. Además, estos mercados suelen ser una experiencia cultural en sí mismos, permitiéndote interactuar con los lugareños y conocer la gastronomía local de una manera más auténtica.
Lleva Snacks Saludables Contigo
Cuando estés en movimiento, es importante llevar contigo algunos snacks saludables para evitar caer en la tentación de comer alimentos poco nutritivos por conveniencia. Empaca frutas frescas, nueces, barras de granola caseras o yogur en porciones individuales. Estos alimentos te proporcionarán energía y nutrientes sin comprometer tu presupuesto.
Bebe Suficiente Agua
Mantenerse hidratado es esencial para mantener una alimentación saludable. Lleva contigo una botella de agua reutilizable y bebe agua regularmente durante tus viajes. Esto no solo te ayudará a mantenerte hidratado, sino que también te ayudará a evitar la tentación de comprar bebidas azucaradas o gaseosas que no aportan nutrientes. En muchas ciudades europeas abundan fuentes de agua potable, así que lleva tu termo o botella contigo y llénala cuando lo necesites. Ten en cuenta que hay paises donde es seguro tomar agua de la llave, pero si tienes dudas, es preferible comprar en botellas.
Explora la Cocina Local
Una de las mejores formas de disfrutar de comidas saludables y auténticas durante tus viajes es explorando la cocina local. Prueba platos típicos de la región que estén preparados con ingredientes frescos y locales. Pregunta a los lugareños sobre los lugares donde puedas probar auténtica comida local a precios razonables. Esta experiencia no solo te permitirá descubrir nuevos sabores, sino también sumergirte en la cultura culinaria del lugar que visitas.
Cafeterias y supermercados
En los supermercados puedes encontrar ensaladas frescas y sabrosas, preparadas con una variedad de vegetales y proteínas. Estas ensaladas suelen estar disponibles en diferentes tamaños, lo que te permite elegir la porción adecuada para ti. Además, también es posible encontrar sándwiches saludables, elaborados con pan integral, rellenos de vegetales frescos, carnes magras y opciones vegetarianas. En las cafeterías, es común encontrar opciones como wraps de pollo a la parrilla, ensaladas de quinoa con vegetales, bowls de poke con pescado fresco y arroz integral. Estas alternativas son perfectas para llevar contigo durante tus viajes y disfrutar de una comida equilibrada a un precio justo.
Controla las Porciones
Es fácil dejarse llevar por las porciones grandes o los platos abundantes cuando estamos de viaje. Sin embargo, esto puede llevarnos a comer en exceso y comprometer nuestra alimentación saludable. Trata de controlar las porciones y escucha a tu cuerpo para identificar cuando estás satisfecho. Si te sobra comida, considera pedir un recipiente para llevar y así aprovecharla en otra ocasión.
Conclusión
Comer saludable mientras viajas con un presupuesto moderado puede ser un desafío, pero no es imposible. Con un poco de planificación y tomando decisiones conscientes, puedes disfrutar de comidas nutritivas sin gastar una fortuna. Recuerda investigar, elegir opciones saludables en restaurantes, aprovechar los mercados locales, llevar snacks saludables contigo, beber suficiente agua y explorar la cocina local.
No olvides que lo más importante es disfrutar.
¡Bon appétit y buen viaje!